Reseña:
La decoradora Zoe Luce ha encontrado la paz y la felicidad en Whispering Springs, Arizona. Tiene un trabajo que le encanta y se está acostumbrando a convivir con el detective privado Ethan Truax, con el que se acaba de casar. Por suerte, el peligro que hizo que ella y Ethan se unieran ya es agua pasada, o al menos es lo que Zoe cree. Muy poca gente conoce su extraordinaria habilidad para percibir los oscuros secretos que se esconden en las paredes de una casa, y ella quiere que así siga siendo, incluso con respecto a Ethan. Sin embargo, alguien está acechándola, alguien que lo sabe todo sobre ella y que sigue cada uno de sus movimientos. Se trata de la misma persona que está amenazando a Arcadia Ames, el único habitante de Whispering Springs que conoce la verdad sobre Zoe. Pero, ¿no estarán ella y Arcadia cayendo en la trampa de alguien más peligroso de lo que jamás pudieran imaginar? A Ethan Truax le pagan por descubrir la verdad; sin embargo, él mismo tiene secretos que es mejor no desvelar. No puede permitir que las amenazas que acechan a Zoe se vean cumplidas, aunque le inquieta la posibilidad de que la verdad sea un peso que la relación entre ambos, todavía frágil, no logre soportar. Pero Ethan no es el único que tiene miedo. Zoe teme que, en vez de liberarla, la verdad sólo consiga encerrarla una vez más, y de forma irreversible, en sus peores pesadillas.